Los funcionarios públicos en España reciben una serie de retribuciones, entre las que se encuentran las básicas, como el sueldo, los trienios y las pagas extraordinarias. Además, existen retribuciones complementarias, como el complemento de destino, el complemento específico, el complemento de productividad y las gratificaciones por servicios extraordinarios.
La Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2017 establece que el complemento de productividad se asignará en función del desempeño del puesto de trabajo y la consecución de objetivos, pero no generará derechos individuales en periodos sucesivos. Las gratificaciones por servicios extraordinarios solo podrán ser concedidas por servicios realizados fuera de la jornada normal de trabajo y serán excepcionales, no generando derechos individuales en periodos sucesivos.